A pesar de que los desarrolladores codifican en un mundo Agile con herramientas Agile, otros trabajadores de la empresa deben definir requisitos, solicitar cambios, gestionar los casos de ensayos y realizar un seguimiento del estado del proyecto. Encontrar el equilibrio entre el desarrollo del software Agile y mantener los requisitos corporativos como la trazabilidad o la gestión de riesgos y requisitos suponen todo un desafío en la colaboración. No obstante, es un reto que se puede superar con la estrategia y las herramientas adecuadas.
Planificadores, testers, desarrolladores y requisitos conviven normalmente en islas con sus propios datos y herramientas y con conexiones variables, si se dan. Las actuales herramientas de gestión del ciclo de vida de las aplicaciones (ALM) integran estos silos de automatización con funcionalidades sólidas que unifican y ofrecen soporte a roles de diferentes dominios, algo que puede implementarse en las grandes empresas. Los requisitos, las tareas, los hitos del proyecto y la información sobre el coste del mismo, así como las solicitudes de cambio, los planes de prueba, las funcionalidades, el código fuente, las compilaciones, etc., existen en una «fuente única» en un repositorio versionado, totalmente rastreable y basado en el flujo de trabajo.
Descubre cómo las herramientas de ALM de un enfoque Live pueden salvar las distancias entre los equipos de desarrollo de software Agile y los procesos corporativos en nuestra infografía.